Cuatro parejas de amigos deciden irse de viaje un fin de semana para descansar un poco y desconectar del trabajo. Se supone que esa es la misión del viaje, pero lo cierto es que la escapada ha sido orquestada por tres de las parejas para ayudar a la otra.
Ruby y Peter forman la pareja a la que las otras quieren ayudar. Las otras tres parejas se han dado cuenta de que la relación de sus amigos es un desastre y por eso deciden ponerles las cosas claras, tanto que les plantean que quizá lo mejor es que se divorcien.
Eso va a provocar consecuencias, tanto en la relación de Ruby y Peter como pareja como en su relación con sus amigos, pues no se esperaban eso de ellos.
Ahora, una vez que sus amigos les han planteado la idea, llega el momento de que se lo piensen, de que se lo planteen de una manera seria, puesto que aunque la idea no les hace gracia al principio, lo cierto es que sus amigos tienen razón.
De todas maneras, siempre les queda la posibilidad de volver a intentarlo, algo que también piensan durante el fin de semana, que se va a hacer muy largo y que va a dar lugar a que surjan muchas ideas sobre su futuro.