Una joven aparece muerta en un pequeño pueblo de Virginia. Alguien la había enterrado mal en el campo y por eso la han encontrado enseguida. Aparece desnuda y la policía decide llevarla a la funeraria local, para que el dueño y su hijo le hagan la autopsia.
La mujer aparece desnuda y a simple vista no hay una causa de la muerte. Padre e hijo comienzan la autopsia examinando el exterior y lo primero que les llama la atención es que la mujer no tiene huellas dactilares.
Prosiguen con la autopsia para dar con la causa de la muerte, pues por la forma en la que ha aparecido está claro que ha sido asesinada.
Durante toda la noche la autopsia va revelando datos, los cuales van apareciendo poco a poco, casi con casa corte que los de la funeraria le hacen al cuerpo de Jane Doe, nombre de la mujer fallecida.